miércoles, 30 de abril de 2008

Las Dos Vasijas


Un cargador de agua de la India tenía dos vasijas que colgaban a los extremos de un palo y que llevaba en cima de los hombros.

Una de las vasijas tenía varias grietas mientras que la otra era perfecta y conservaba toda el agua al final del largo camino a pie desde el aroyo hasta la casa de su patrón. Pero cuando llegaba la vasija rota sólo tenía la mitad del agua. Esto fue así diariamente a lo largo de dos años completos. Desde luego la vasija perfecta estaba muy orgullosa de sus logros, porque se sabía`perfecta a los fines para lo que había sido creada, pero la pobre vasija agrietada estaba muy avergonzada de su propia imperfección y se sentía miserable porque sólo podía hacer la mitad de todo lo que se suponía que era su obligación.

Después de dos años la tinaja quebrada le habló al aguador diciéndole: " Estoy avergonzada y me quiero disculpar con tigo porque debidio a mis grietas sólo puedes entregar la mitad de mi carga y sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir". El aguador apesadumbrado le dijo compasivamente: "Cuando regresemos a la casa quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino".

Así lo hizo la tinaja y en efecto vió hermosísimas flores a lo largo del trayecto pero igual se sentía apenada porque al final sólo quedaba dentro de sí la mitad del agua que debía llevar.

El aguador le dijo entonces: "¿Te diste cuenta que las flores a lo largo del camino sólo crecen de tu lado? Siempre he sabido de tus grietas y quise sacar lo positivo de ellas, sembré semillas de flores a lo largo de todo el camino donde vas y todos los días las has regado y por dos años yo he podido recoger estas flores para decorar el altar de mi madre. Si no fueras exactamente como eres, con todo, aún con tus defectos, no hubiera sido posible crear esta belleza"

Cada uno de nosotros tiene sus propias grietas, todos somos vasijas agrietadas pero debemos saber que siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados.

No hay comentarios: